El vídeo-CV: perfecto para según el tipo de perfil ofertado

Cada vez es más frecuente encontrarse con candidatos que describen sus competencias y habilidades a través de un vídeo-currículo. Aunque aún falta mucho porque se integre en nuestra sociedad, suele ser frecuente toparse con este tipo de recurso en sectores, sobre todo que requieren de amplias habilidades creativas. Sin embargo, el vídeo CV suele estar bastante ligado también a la marca personal de muchos profesionales, sean del ámbito que provengan.
Muchas veces, un folio plagado de letras con las que se describen nuestras competencias, experiencias y habilidades, no siempre es efectivo. La solución radica en ofrecer una información esquematizada que invite a la lectura. Y es que vivimos en una sociedad cada vez más consumista de lo audiovisual.
Se trata de una de las mejores herramientas para definir nuestra personalidad en el trabajo. Por ello, no sólo podemos pensar que corresponde únicamente a sectores creativos —profesores, periodistas, artistas, cineastas, etc. —, sino también puede llegar a ser bastante útil para todos aquellos profesionales que deban enfrentarse al público en presentaciones, congresos, ponencias, foros, etc. Todo depende del tipo de perfil del puesto de trabajo. Un director de comunicación, de marketing, un portavoz, un community manager, un CEO, deben dominar habilidades que requieren enfrentarse a una cámara, hablar en público o ser notablemente creativo en el mundo digital.
Por el contrario, otros candidatos, pensemos por ejemplo, en un informático o un financiero, no necesariamente deben tener manejo de la cámara. Incluso, puede ser hasta contraproducente para algunas personas. No todo el mundo tiene soltura ni la destreza de hablar, incluso, para un grupo reducido de personas. Lo mismo ocurre con el tipo de empresa al que vaya dirigido. No todas entran dentro de una cultura como la que precisa del vídeo-currículo.
Te ayudará a decidirte si reúnes estas condiciones: si tienes la habilidad para comunicar y expresar mensajes claros y directos; si tu sector está abierto a este tipo de iniciativas; si tienes un blog, página personal u otro canal donde dar a conocer tu marcar personal. En contraposición, el vídeo-CV resulta poco práctico si muestras inseguridad y nerviosismo frente a la cámara; si tienes dudas sobre tu discurso; si trabajas en un sector demasiado hermético y tradicional; o si careces de un canal personal adecuado para exponerlo.
Finalmente optamos por su producción. Para ello, es importante tener en cuenta que no es sencillo obtener un resultado realmente bueno. Hay que asesorarse por empresas que suelen dedicarse a ello. Naturalidad y seguridad siempre frente a la cámara. Asimismo, tampoco hace falta que la persona salga demasiado en pantalla. Sólo hay que ver ejemplos como este, para dejar volar nuestra imaginación, acorde a nuestras habilidades y debilidades.
Una vez tenemos claro estos dos principios, damos rienda suelta a explicar tres puntos fundamentales: quién somos, qué hacemos y por qué importa nuestro trabajo. Alrededor de ello, podemos crear el ambiente creativo (o no) que mejor se adapte a nuestro ámbito profesional. Y por supuesto, al igual que se hace con un currículo convencional, el vídeo-CV también hay que mantenerlo al día. Se puedes indicar fecha sobreimpresionada en pantalla, o bien grabar un mensaje generalizado, protegiéndolo todo lo posible de la obsolescencia.
Para su difusión, existen muchos portales especializados, pero también se puede pedir información directamente a empresas empleadoras. Es recomendable que sea la reclutadora que sea, el candidato se informe adecuadamente de los lugares que garanticen la protección y el uso de una información tan preciada.
Las redes sociales y páginas propias suelen ser un gran canal para su difusión. Asimismo, si se considera adecuado por el tipo de candidato, puede valorarse su propagación en ambientes universitarios o escuelas de negocios. Éstos suelen ser lugares donde se germinan los productos más innovadores —recordemos que Facebook comenzó su exitosa andadura en el ámbito universitario.
Lo importante es darnos visibilidad como profesionales, definir una marca perosnal clara y ser coherentes con lo que ofrecemos en nuestrp vídeo-CV. Los valores más demandados por las empresas ya se está dejando claro: innovación, creatividad, habilidad comunicativa y capacidad resolutiva.