Conectar personas, negocio asegurado
Numerosos debates llevan años teniendo lugar por todos los rincones del mundo desarrollado. El tema: ¿Las tecnologías nos unen o nos separan? Una nueva versión de relaciones interpersonales es la identidad con la que se comunican generaciones nuevas y no tan recientes.
Internet fue la llave para relacionarse con cualquier persona al otro lado del globo terráqueo. A partir de entonces las conexiones entre personas a través de la red se han ido multiplicando paralelamente a las conexiones personales más humanas. Y es que al mismo tiempo que las tecnologías “aíslan”, conectan a personas. Ese es el negocio de un futuro ya convertido casi en presente.
El saturado sector de la conexión entre usuarios hace que cada vez existan más y más aplicaciones cuya razón de ser signifique poner en contacto personas, ya sea para que interactúen en la misma plataforma como para que tengan encuentros personales.
Se trata de una versión muy mejorada de los clásicos foros donde sólo se podría acceder a través del ordenador. A raíz de ahí, múltiples empresas ha desarrollado numerosas aplicaciones para los diferentes dispositivos móviles existentes. Todas enmarcadas en el empeño por unir personas, lo que supone un fin bastante enriquecedor por parte de empresas y usuarios.
Lo cierto es que ya sea porque nos hemos cansado de los amigos de siempre o simplemente por conocer nuevas experiencias que apacigüen nuestra hambre por conocer y aprender, ahí están las miles de posibilidades que nos ofrece el mercado. Y tiene pinta de que vendrán más.
“Para progresar hay que conectar personas, no aparatos”, señaló el fundador de Facebook Mark Zuckerberg al comienzo de este 2015, durante su campaña para promover Internet.org. Una iniciativa impulsada por Facebook que aglutina a líderes de la tecnología, organizaciones sin ánimo de lucro y comunidades locales para conectar a los dos tercios de la población mundial que no cuentan con acceso a Internet.
Facebook volvió a alcanzar un nuevo hito a primeros de este año. Uno de cada cinco habitantes del mundo dispone de una cuenta de la red social, y la utilizan de manera activa. En concreto, el número de usuarios activos se sitúa en los 1.390 millones alrededor del globo.
Según el informe de OBS, España cuenta con una población online de 23 millones de personas. El 73% de esta población (17 millones de usuarios) utiliza activamente las redes sociales mensualmente en 2014, y únicamente el 8% dice no tener cuenta en ninguna red. Un 73% afirma que accede a las redes desde todos los dispositivos, el 68% únicamente desde ordenador, el 46% desde Smartphone y el 21% desde Tablet.
Pero Mark Zuckerberg quiere seguir creciendo, poniendo a disposición de sus clientes potenciales lo único que les impide hacerse miembros de su red social: Internet. Bajo el lema “conectar personas”, la compañía tecnológica colabora con operadores móviles para expandir más la marca Facebook. Maketing digital potente, y del bueno. Con un fin bastante atractivo e inteligente. Una de las ventajas principales de la conexión interpersonal, y casi podría ser el fin último, es el crecimiento intercultural de ambas. El potencial de crecimiento se multiplica así como las posibilidades de desarrollo de una comunidad.
Una faceta del ser humano que el propio público está solicitando a las empresas de todo el mundo. Su necesidad para relacionarse con los demás, abrir el espectro de posibilidades. Solo faltan organizaciones y startups innovadoras con la suficiente originalidad y chispa como para crear nuevas ideas desde la nada.